La saga Dynasty Warriors junto a todas sus expansiones, spin-offs y sagas derivadas como Samurai Warriors o One Piece: Pirate Warriors ha sido uno de los mayores aciertos comerciales que se recuerdan en los últimos 15 años, al menos en Japón.
Hoy hemos conocido estimaciones que revelan que el género "musou" ha alcanzado los 22 millones de juegos vendidos en el país asiático desde el año 2000, un dato que da buena fe de su gran éxito.
Hoy hemos conocido estimaciones que revelan que el género "musou" ha alcanzado los 22 millones de juegos vendidos en el país asiático desde el año 2000, un dato que da buena fe de su gran éxito.
Sin embargo, muchos probablemente ya no recordarán que inicialmente Dynasty Warriors se lanzó en la primera Playstation bajo un enfoque muy diferente al que nos hemos acostumbrado a partir de Dynasty Warriors 2. En lugar de un juego relativamente abierto en el que nos enfrentamos a oleadas de enemigos, la primera entrega era un juego de lucha tradicional uno contra uno.
De este modo, Koei buscaba acercarse a la perspectiva de los por entonces populares Tekken o Virtua Fighter, si bien el uso de armas lo hacía especialmente similar a Soul Blade, el precursor de los actuales Soul Calibur y que se había estrenado en los arcades un año antes.
Podíamos elegir entre 16 personajes, todos ellos inspirados por la estética del "Romance de los Tres Reinos". Más allá de eso lo cierto es que el título era simplemente uno más de los arcade 3D de lucha que proliferaban en aquel entonces tal y como podéis ver en las imágenes y el vídeo que os dejamos a continuación.
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